Si hay una hortaliza que nos da un juego increíble en la cocina es el calabacín. Por su sabor combina perfectamente con multitud de acompañamientos y aderezos y por su forma y textura nos permite cortarlo de muchísimas formas para dar vida a nuestros platos, por ejemplo, cortándolo en taquitos para salteados, en hilos para espagueti, en láminas para lasaña o incluso enrollado como es este caso para realizar unos llamativos conos rellenos. Además, por su bajo valor calórico y su gran aporte de vitaminas y minerales lo convierten en un aliado perfecto en dietas de adelgazamiento.
Para realizar el relleno de esta receta hemos utilizado surimi que nos ofrece una cantidad de proteínas más que aceptable (entre 10 y 15 gramos por cada 100 g de producto) y, aunque siempre es preferible utilizar productos frescos, es cierto que en ocasiones necesitamos salidas rápidas a la hora de cocinar y esta es una muy buena opción para esos días en los que vamos corriendo. Esta receta la hemos realizado de la siguiente manera:
INGREDIENTES:
- 1 calabacín
- 400 g surimi o palitos de cangrejo
- 1 cebolla
- 3 tomates secos
- 1 diente de ajo
- 100 g yogur griego light
- Aceite de oliva virgen extra
- Pimienta
- Sal
PREPARACIÓN:
- Cortamos en trocitos pequeños la cebolla, el ajo y los tomates secos y los salteamos en una sartén caliente en la que previamente hemos añadido unas gotas de aceite de oliva. Salpimentamos.
- Cortamos también a pequeños tacos las barritas de surimi y, una vez que la cebolla, el ajo y el tomate están casi a punto, los añadimos a la sartén y salteamos todo junto durante un minuto aproximadamente (el surimi requiere muy poco cocinado).
- Lo retiramos del fuego y echamos todo en un bol. Añadimos el yogur griego light, salpimentamos y movemos integrando todos los ingredientes. Reservamos.
- Con una mandolina (o cuidadosamente con un cuchillo bien afilado) cortamos en láminas muy finas el calabacín y lo pasamos ligeramente por la plancha para que pierda un poco la rigidez pero sin pasarnos (el calabacín debe quedar con un punto crujiente).
- Vamos dándole a cada lámina la forma de un cono enrollándola sobre sí misma y, una vez conseguido, los vamos rellenando con el relleno que tenemos reservado en el bol.
Sugerencias:
- En este caso lo hemos acompañado de un poco de pasta y salsa de tomate pero, si por tu dieta necesitas reducir el aporte de hidratos de carbono, se puede acompañar perfectamente de una ensalada, atún, pollo, tofu, etc.
- Evidentemente a la hora de rellenar los conos hay que dejar volar la imaginación e ir variando según los ingredientes que más nos gusten o que dispongamos, ya que el objetivo siempre es alimentarnos pero de una manera atractiva, entretenida y ¡deliciosa!